El 19 de marzo de 2012 celebramos el 200 aniversario de nuestra Primera Constitución, para conmemorarlo nada mejor que hacer un poco de Historia y entender el contexto histórico en el que se crea y sus caractarísticas más significativas.

Tras la Batalla de Trafalgar (1805), en la que la armada franco-española había sido derrotada por Horatio Nelson, Napoleón es consciente de que la única forma de dañar los intereses de Gran Bretaña es impedir el comercio entre las Islas y el continente. La estrategia que idea es el famoso bloqueo económico, al que obliga a sumarse al resto de naciones europeas. Portugal, aliado tradicional de Inglaterra se niega  a apoyarlo y es objeto de la animadversión de Francia, que decide su invasión. Pero, para llegar a Portugal, Napoleón debe hacerlo a través de España. Aprovechando las buenas relaciones del momento, pide a Godoy, Primer Ministro español, permitir el paso de sus tropas. Ambos dirigentes firman el tratado de  Fontainebleau, que provocará una reacción airada que se hará patente en el Motín de Aranjuez. Esta revuelta alentada por los sectores afines al Príncipe Fernando, provocará la caída de Manuel Godoy y la abdicación involuntaria de Carlos IV. La brecha entre padre e hijo será aprovechada por Bonaparte, quien alejará a la familia real de territorio español y en Bayona les convencerá para una abdicación conjunta. El vacío de poder existente en España es la oportunidad para invadir nuestro territorio y colocar en el trono, en un claro acto de nepotismo, a su hermano José Bonaparte. La reacción del pueblo español es inmediata y el 2 de mayo de 1808 comienzan los levantamientos en Madrid; tales hechos aceleraron el nombramiento del hermano mayor de Napoleón en rey de España el 6 de junio de 1808.  José I fue un rey con buenas intenciones, pero que se vio sobrepasado por los acontecimientos que desembocaron  en un conflicto que durará hasta 1814 y que es conocido como La Guerra de Independencia.

Este monarca ha pasado a la Historia con diversos sobrenombres, todos ellos peyorativos entre los que destaca el de Pepe Botella. El origen de este apodo no esa claro, aunque se barajan varias hipótesis, una hace referencia a la decisión de suprimir los impuestos sobre el alcohol y otra a un acontecimiento que se produjo en tierras riojanas. Parece que estaba de paso José Bonaparte por La Rioja, cuando cerca del municipio de Calahorra fueron asaltadas las tropas francesas por un grupo de españoles que no dudaron en hacerse como botín  con  el vino que portaban. A consecuencia de ello, José dio orden de entrar en tal población y llevarse por la fuerza todo  el vino que pudo. Uno de los primeros que difundiría tal apelativo sería el escritor Félix Enciso Castrillón, autor en 1808 de la obra satírica El sermón sin fruto o sea José Botellas en el Ayuntamiento de Logroño. En ella José I, bajo los efectos del vino que no para de beber para, supuestamente, aclarar su voz, intenta convencer a los logroñeses de los beneficios que traerá la llegada de los franceses. A partir de esta sátira comienza el uso extendido de tan famoso apelativo.

Sin embargo, para algunos españoles, la invasión francesa suponía una clara oportunidad para erradicar el absolutismo e introducir en España un nuevo sistema político con algunos de los avances logrados en Francia por la Revolución. Este grupo de intelectuales fueron conocidos como los afrancesados. Poco a poco se fueron desengañando de las verdaderas intenciones de Napoleón y muchos de ellos no dudaron en mostrar su desacuerdo  sus críticas al invasor. Entre  los ejemplos más significativos podemos encontrar al propio Goya, auténtico cronista de los desmanes provocados por el conflicto.

Poco a poco, los españoles fueron organizándose en Juntas que tenían por objeto una respuesta a la invasión, que efectivamente estaba viéndose muy dificultada por el desconocimiento del territorio por parte de los franceses y una estrategia de guerra de guerrillas ejercida por parte de los españoles. La necesidad de lograr una mayor coordinación llevó a la formación de una Junta Central que busco asentarse en una población no tomada por los franceses, Cádiz. En los primeros momentos se alojaron en el Colegio Convento de la Compañía de María.

La Junta Central pasó a constituir Cortes en 1810 y a partir de ese momento una de sus prioridades fue redactar para España una Constitución volviendo sus ojos a otras que le habían precedido como la Constitución americana o las Constituciones de la Francia revolucionaria. La Constitución de Cádiz superó incluso a la Primera Constitución francesa, la de 1791, que proponía el sufragio censitario, frente al Universal propuesto en la española de 1812. Los liberales promulgaron nuestra Primera Constitución el 19 de marzo de 1812, día de San José y onomástica del rey José Bonaparte, a quien le ofrecieron a modo de envenenado regalo una Carta Magna. Por tal motivo, fue conocida popularmente con el apelativo de la Pepa, que facilitó el poder jalearla con gritos de entusiasmo: ¡Viva La Pepa!, sin excesivos riesgos.

Tal Constituciónabolía los privilegios en que se asentaba el Antiguo Régimen,  era monárquica ya que mantenía  la figura del rey, se fundamentaba en la Soberanía Nacional (que se ejercería por medio del sufragio universal)  y en la División de Poderes y en sus artículos recogía el espíritu y la esncia  del Liberalismo al defender la libertad y los derechos del individuo. Consideraba, asimismo, el Catolicismo como religión oficial, por lo que  proclamaba el Estado Confesional.

La Guerra de independencia impidió su entrada en vigor. Tras el Tratado de Valençay, por el que se firma la paz con Francia y se permite el regreso de Fernando VII, todas las esperanzas se depositan en el joven rey, al que se le adjetivan como El Deseado. Sin embargo, los liberales pronto ven frustradas sus expectativas, puesto que Fernando VII implanta nuevamente la monarquía absoluta y abole la Constitución. El Liberalismo continúa en la clandestinidad y en 1820 Riego llevará a cabo un pronunciamiento en la localidad sevillana de Cabezas de San Juan, aprovechando la concentración de tropas dispuestas para partir a las colonias americana y sofocar las revueltas independentistas que se estaban produciendo en ellas. Con este pronunciamiento se abrirá un periodo de tres años, conocido como Trienio Liberal, en el que el rey Fernando VII tendrá que aceptar la famosa Constitución liberal. Los acontecimientos darán un nuevo giro cuando en 1823, un ejército francés, Los Cien Mil Hijos de San Luis, enviado por La Santa Alianza pongan fin a este paréntesis liberal y restauren nuevamente el absolutismo.

La actividad a relaizar es la composición de una Infografía en equipo en la que se reflejen las siguientes cuestiones:

  • Origen de la Constitución (Contexto histórico, motivos, antecedentes,»padres de la Constitución», razón del sobrenombre…)
  • Ideas más significativas (relacionad con la Ilustración)
  • Repercusiones, influencias…

Para ampliar vuestros conocimientos podéis consulta estos  interesantes enlaces:

enlace1, enlace2, enlace3,

enlace 4